El detective Shindo es asignado para proteger a la princesa Salno cuando un meteorito aterriza en Kurobe. Salno emerge como una profetisa y llama la atención de la periodista Naoko y de las hadas de Mothra con su premonición de la llegada de un poderoso monstruo espacial. Si Mothra no convence a Godzilla y Rodan de que dejen de lado su odio hacia la humanidad, tendra que enfrentarse al monstruo sola.